En nuestras investigaciones recientes hemos analizado los factores que más influyen en el rendimiento cognitivo, para que personas y organizaciones puedan comprenderlo y tomar las medidas adecuadas con el fin de que el cerebro de todos esté en las condiciones óptimas. En los artÃculos anteriores hemos hablado de los factores ambientales, mientras nos Ãbamos haciendo una imagen de lo que pasa en la oficina. ¡Ahora vamos a hablar del efecto que producen los olores en el cerebro!
Sabemos, por las investigaciones, que ciertos aromas pueden afectar nuestra salud fÃsica, emocional y mental. Pero, ¿cómo sucede esto? Nuestro receptor de olores permite que lo que olemos llegue hasta las regiones del cerebro, incluidas las estructuras del lóbulo temporal medial donde se almacenan las emociones y los recuerdos.
Al estudiar el efecto de los aceites esenciales, algunos investigadores han concluido que estimulan las reacciones quÃmicas en el cuerpo y el cerebro.
¿Qué olores tienen un impacto en el rendimiento cognitivo?
Mediante estos procesos quÃmicos, algunos aromas pueden relajarnos o incluso sedarnos (es decir, lavanda y manzanilla), mientras que otros pueden estimular o excitar (es decir, romero y menta).
Diversos estudios han demostrado que la menta produce un estado más alerta, hace que disminuya la frustración y reduce la ansiedad y la fatiga en condiciones controladas. La lavanda, por el contrario, produce una reducción significativa de la memoria a corto plazo y acorta los tiempos de reacción en tareas que requieren memoria y atención, que es lo que se espera de una fragancia relajante.
Si piensas en fragancias y olores concretos, te darás cuenta de que pueden estar estrechamente relacionados con situaciones o lugares —a menudo nos llevan a recordar momentos o eventos especÃficos—, a veces de forma positiva, y otras no tanto.
Aquà hay una guÃa rápida de los efectos beneficiosos de olores particulares:
Los olores en el lugar de trabajo
Si bien los aromas pueden ser poderosos en términos de sus efectos (ya sean positivos o negativos), los olores pueden ser un tema delicado. Si llega el olor a comida desde el restaurante hasta las áreas de trabajo puede ser una fuente de distracción e irritación para el personal. Del mismo modo, los colegas que comen alimentos con olor fuerte en su sitio son otra fuente constante de tensión en muchas oficinas.
Además de esos aspectos, hay una serie de cuestiones relacionadas con la sensibilidad y la aversión a los olores que emanan de los propios colegas (perfume, loción para después del afeitado, detergentes, suavizantes, olor corporal, mal aliento, etc.); con desinfectantes y productos de limpieza utilizados por los limpiadores de oficina; y ¡cualquier olor que llegue al edificio desde el mundo exterior!
Sin embargo, se pueden tomar algunas medidas, siempre con cuidado y consideración por las preferencias de cada uno.
¿Qué puedes hacer?
Si te parece interesante, busca lo que te funcione a ti. Aquà damos algunas ideas:
1. Compra un aplicador roll-on de aceite esencial en romero o menta y aplÃcatelo directamente en los puntos de pulso (sienes y muñecas) para darte energÃa y revitalizarte.
2. Toma una naranja y deja la cáscara en tu escritorio por un tiempo para que puedas olerla.
3. Pon unas gotas de aceite esencial en un pañuelo de papel y guárdatelo en el bolsillo (como harÃas cuando tienes un resfriado y quieres algo que te ayude a respirar).
4. Prueba a dormir con una bolsita de lavanda debajo de la almohada.
5. Quema un poco de aceite en un difusor antes de ir a la cama para relajarte.
6. Si cuidas tu lugar de trabajo, una posibilidad es poner fragancias de aceites esenciales en espacios concretos, para crear un ambiente de trabajo más equilibrado. Por ejemplo, en espacios diseñados para relajarse y quitarse estrés, podrÃas pensar en poner lavanda o manzanilla en determinados puntos (¡después de todo, tampoco quieres que la gente se adormezca) ¡junto a los colores frÃos!
7. En áreas donde quieras que las personas reciban un impulso de energÃa y claridad (quizás áreas utilizadas para hacer tormentas de ideas o reuniones de creatividad), puedes combinar la menta o el romero para energizar y vigorizar con colores cálidos y estimulantes en los muebles y telas.
Haz que tu cerebro tenga un dÃa estupendo: ¡usa fragancias que funcionen para crear el estado de ánimo que necesitas!
La próxima vez veremos el siguiente factor ambiental que surgió de la investigación. ¡Es el número 13 y el último: ejercitar la memoria cognitiva y la atención plena o mindfulness!
Esta es una traducción realizada por Ana Bustelo del artÃculo original en inglés: COGNITIVE FITNESS CHAPTER 14 – SCENT – WHAT’S THAT SMELL? by Andrew Mawson.
Salud Cognitiva.
AWA investiga la aptitud cognitiva
CapÃtulo 1. Cognición y salud cognitiva. ¿Por qué importa?
CapÃtulo 2. La cognición… ¿en qué consiste?
CapÃtulo 3. ¿Has desayunado hoy?
CapÃtulo 4. ¿Estás deshidratado?
CapÃtulo 5. ¿Qué tal dormiste anoche?
CapÃtulo 6. ¡No te dejes vencer por la pereza!
CapÃtulo 7. ¿Hoy has tomado alguna droga psicoactiva?
CapÃtulo 8. ¿Es verdad que el cerebro necesita azúcar?
CapÃtulo 9. ¿Te oyes pensar?
CapÃtulo 10. ¿Te concentras bien cuando hace calor?
CapÃtulo 11. ¿Es un mito la multitarea?