En nuestras investigaciones recientes hemos analizado los factores que más influyen en el rendimiento cognitivo, para que personas y organizaciones puedan comprenderlo y tomar las medidas adecuadas con el fin de que el cerebro de todos esté en las condiciones óptimas. Esta entrada trata del impacto que tiene ejercitar la memoria cognitiva y la capacidad de estar atento o ser consciente de uno mismo (mindfulness).
Se repite mucho que ejercitar la memoria y la capacidad cognitiva es eficaz para mejorar algunos aspectos del funcionamiento de nuestro cerebro, es decir, nuestra capacidad para recordar, tomar decisiones, prestar atención y hacer cosas con rapidez y precisión.
La mayorÃa de las investigaciones al respecto se han centrado en niños, adultos mayores o personas con deterioro cognitivo leve, pero muestran que funciones como la memoria a corto plazo o de trabajo es plástica y que este tipo de ejercicio aprovecha ese potencial.
¿Me ayuda a hacer otras cosas?
Menos convincentes son las pruebas que pretenden afirmar que si entrenas un aspecto de su cerebro (como la memoria de trabajo) esto se transfiere a otros aspectos. Esto no se ha podido demostrar. También hay pruebas de que la realización de una actividad especÃfica del entrenamiento no se transfiere a otras actividades que requieran esa misma habilidad, ni tampoco a otras habilidades.
Sin embargo, los expertos también concluyeron que entrenar durante un perÃodo de tiempo podrÃa provocar cambios en la estructura y función del cerebro, y que tales cambios podrÃan tener un efecto generalmente positivo en las actividades cognitivas (de la misma manera que el ejercicio fÃsico puede aumentar la capacidad cardiovascular).
Meditación y mindfulness
Investigaciones recientes han demostrado que las técnicas de relajación como el mindfulness (una técnica de meditación dirigida a aprender a concentrar la mente en el presente) podrÃan asociarse con mejoras en la memoria a corto plazo y la atención ejecutiva (toma de decisiones), pero no estamos seguros de por qué es asÃ.
PodrÃa ser que estas técnicas reducen el estrés y desarrollan la resiliencia. Otra teorÃa es que son técnicas que implican la autorregulación (la capacidad para mantener la concentración y la atención) y la actitud (si uno está realmente abierto a tener la experiencia). De modo que, si uno cree que la técnica puede funcionar, es capaz de dedicar suficiente esfuerzo y energÃa a la experiencia, siente que es efectivo. Otro ejemplo más serÃa que las personas con poca capacidad de memoria de trabajo o a corto plazo, tienen más probabilidades de sufrir pensamientos intrusivos emocionales y tienen menos éxito en la supresión de emociones, por lo que desarrollar un enfoque más centrado a través del mindfulness o la meditación puede ser beneficioso.
¿Qué puedes hacer para aliviar el estrés?
1.- Si estás abierto a la experiencia de hacer un poco de mindfulness o meditation, hay muchos libros, cursos y aplicaciones que te ayudarán a encontrar algo que te sirva.
Un par de ejemplos:
♦ MindTools – Es un guÃa de atención plena https://www.mindtools.com/pages/article/mindfulness.htm o descargue la aplicación MindToolsHeadspace (la meditación fácil) – https://www.headspace.com/
♦ Investiga un poco sobre las herramientas disponibles. No son para todo el mundo y dependerá de tu propia salud y de tu situación, pero puede encontrar algo que te funcione a ti.
2.- Estos métodos te pueden ser útiles si tienes dificultades para concentrarte, para prestar atención o para mantener la claridad de pensamiento durante tareas complejas y exigentes. También pueden ser de utilidad si tienes ansiedad y estrés. Sin embargo, no son una alternativa para enfrentarte, por ejemplo, a una carga de trabajo particularmente exigente: si estás sobrecargado, obviamente serÃa mejor ir a la fuente del problema, si es posible.
3.- Merece la pena explorar otras opciones relacionadas con el entrenamiento cognitivo si eres consciente de que tienes problemas con procesos especÃficos, como la memoria. Hay herramientas disponibles que medirán tu cognición y ofrecerán ejercicios para mejorar cada área. Algunos incluso responden al progreso que tú hagas a lo largo del tiempo y se adaptan para centrarse en áreas en que estés más necesitado.
4.- Busca alternativas más habituales para relajarte: leer, pintar o dibujar, y otras actividades absorbentes o pasar tiempo con amigos y familiares.
Haz que tu cerebro tenga un dÃa estupendo: ¡presta atención a los factores que hemos enumerado aquÃ, reflexiona sobre ellos y crea nuevos hábitos para el año que viene!
Esta es una traducción realizada por Ana Bustelo del artÃculo original en inglés: COGNITIVE FITNESS CHAPTER 15 – WHAT’S ON YOUR MIND? by Andrew Mawson.
Salud Cognitiva.
AWA investiga la aptitud cognitiva
CapÃtulo 1. Cognición y salud cognitiva. ¿Por qué importa?
CapÃtulo 2. La cognición… ¿en qué consiste?
CapÃtulo 3. ¿Has desayunado hoy?
CapÃtulo 4. ¿Estás deshidratado?
CapÃtulo 5. ¿Qué tal dormiste anoche?
CapÃtulo 6. ¡No te dejes vencer por la pereza!
CapÃtulo 7. ¿Hoy has tomado alguna droga psicoactiva?
CapÃtulo 8. ¿Es verdad que el cerebro necesita azúcar?
CapÃtulo 9. ¿Te oyes pensar?
CapÃtulo 10. ¿Te concentras bien cuando hace calor?
CapÃtulo 11. ¿Es un mito la multitarea?
CapÃtulo 12. Está un poco oscuro, ¿no?